I LA LUCHA CONTRA LA TIRANÍA BATISTIANA
EN EL TERRITORIO DESDE 1952 A
1958.
Al producirse el Golpe de Estado el 10 de Marzo de
1952 encabezado por Fulgencio Batista Zaldívar, el territorio de Guamá tenía la
misma situación económica política y social que en los gobiernos anteriores. Continuaba
con sus propiedades de casi nueve mil caballerías de tierras la compañía
norteamericana Cuban Develonmet Company
que abarcaba desde Caimanes en Santiago de Cuba, hasta las Cuevas del Turquino,
así también la Beatle
Sugar Company, que abarcaba desde Ocujal del Turquino hasta
Pilón de Manzanillo. Los Babún habían desplazado a las Bahamas y Sobrinos
Abascal y se mantenía como única compañía maderera. El resto de los
terratenientes, se mantenían como tal. Los asesinatos, atropellos y desalojos
se agudizaban, al igual que el desempleo, el hambre, la miseria, las
enfermedades y la muerte. Al darse el Golpe de Estado el Partido Socialista
Popular continuaba siendo fuerte en el territorio. Había logrado incorporar
gran cantidad de obreros y campesinos a sus filas las cuales apoyarían con
posterioridad al Ejército Rebelde. Cuando se da el Asalto al Cuartel Moncada el
26 de Julio de 1953 la noticia se conoció a través de los pasajeros que venían
en las goletas que se encontraban en Santiago de Cuba y por los pocos
radiorreceptores que existían en esta zona. Cabe destacar que la noticia que
llegó lo hizo de forma distorsionada. Posterior al Asalto al Cuartel Moncada en
la zona estuvieron presentes dos de sus asaltantes, los cuales permanecieron en
la zona de Caletón Blanco por más de 10 meses. Ellos fueron Orlando Galán
Betancourt y Ricardo Santana Martínez. Al darse el desembarco del Granma, el
Partido Socialista Popular dio las
orientaciones de apoyar y colaborar con las expediciones en todo lo que se
pudiera. Esto se va a materializar a partir del Combate de La Plata el 17 de Enero de
1957, donde muchos brindaron sus casas y su ayuda. Muchos de sus miembros
después conformaron parte como combatientes del Ejército Rebelde como fue el
caso de los Labaut, Duconger, Naranjo y muchos más. Muchos cayeron en combate
como Marcos Borrero y otros fueron asesinados como Salvador Días Mendoza. Las
células del 26 de Julio se organizaron en el municipio después de la llegada
del Granma y del Combate de la Plata. Una
de ellas dirigida por Emiliano Peña en la zona de La Plata. Otra en Peladero cerca
de Uvero, bajo la dirección de David Gómez.
II REBELDES
EN GUAMÁ
El 15 de Enero de 1957 transcurridos 44 días del
desembarco del Granma, la tropa rebelde que al mando de Fidel Castro salió de
Purial de Vicana, había realizado difíciles marchas por los firmes de la Sierra Maestra. La
tropa estaba integrada por 29 combatientes, de ellos 18 expedicionarios, 8
campesinos y 3 combatientes enviados por el movimiento de Manzanillo y algunos
prácticos. Era necesario desmentir las falsas noticias de que todos los
expedicionarios habían muerto o abandonado la lucha, incluyendo al propio
Fidel, por lo que este busca la forma de desmentir a las mismas y demostrar a
Cuba y al mundo de que aún existía un grupo de revolucionarios capaces de continuar la lucha y cumplir con los
objetivos propuestos en México. Fidel se propone como objetivo el Cuartel de La Plata, lugar ubicado entre La Magdalena y Palma Mocha
en un pequeño valle donde desemboca el río del mismo nombre. Existía un pequeño
caserío habitado por campesinos y el mayoral de la finca La Plata. La pequeña tropa
contaba con 24 armas. El día 16 detuvieron a algunos lugareños que le informaron
acerca de lo que tenía el cuartel y más tarde bien entrada la noche capturaron
al chivato Chicho Osorio, el cual dio los detalles exactos. En el cuartel
habían 10 hombres y el sargento tenía un M-1 y una ametralladora Tompson. el
resto del armamento estaba compuesto por fusiles Sprinfield. A las 2:30 de la
madrugada, se inició el combate. Durante el desarrollo del mismo fue
ajusticiado Chicho Osorio y los guardias contestaban el fuego desde el cuartel
y desde la casa del mayoral. Al cabo de aproximadamente media hora el cuartel
se rindió y de los diez soldados que habían en el mismo, dos estaban muertos y
cinco heridos. El Che prestó atención médica a los heridos. Fidel ordenó se le
dejaran medicamentos y los dejó en libertad. La acción de La Plata significó además de la
victoria para la guerrilla, la proclamación de su existencia como una fuerza
combatiente capaz de iniciar acciones ofensivas contra las fuerzas enemigas.
Para la dictadura de Batista la derrota en La Plata significó la
obligación de reconocer la existencia del grupo guerrillero que echaría por
tierra las campañas de desinformación que afirmaban que Fidel Castro y sus
hombres estaban muertos o aislados y desalentados. Como medida inmediata se envió a una compañía de tropas selecta en persecución
de los rebeldes desde el sur, mientras que por el norte se comenzó a tender un
amplio cerco. El Arroyo del Infierno es un pequeño riachuelo de escaso
recorrido que desemboca en el río Palma Mocha y subiendo por las laderas de las
lomas que lo bordean se llega a un abra circular en el monte. Allí se
levantaban dos pequeños bohíos donde la pequeña columna guerrillera llegó el
día 17 de Enero de 1957 por la tarde y armó un campamento. En la madrugada del
día 22 se oyeron algunos disparos aislados por la zona del río Palma Mocha y
esto los incitó a mantener todavía en mejores condiciones sus líneas, cuidarse
más y a esperar la inminente presencia de la tropa enemiga. Era medio día
cuando aparecieron los primeros soldados y Fidel con un disparo que fulminó a
uno de los soldados inició el combate el cual se generalizó. El combate fue de
una heroicidad extraordinaria y pronto cada combatiente estaba por su lado
luego de haber cumplido por sus partes los objetivos propuestos. Se le contaron
4 muertos del enemigo. Meses después se
enteraron al detener un chivato que fueron cinco. El Ejército Rebelde no tuvo
baja alguna. No fue una victoria completa, pero tampoco pírrica. Se habían
medido de nuevo las fuerzas con el ejército en nuevas situaciones y esto mejora
mucho el ánimo de los rebeldes. Dicha acción permitió que siguieran durante
todo el día trepando hacia los montes más inaccesibles para escapar a la
persecución de grupos mayores del ejército enemigo. El teniente que comandaba
la tropa que perseguía a los rebeldes se llamaba Sánchez Mosqueda y su nombre
se hizo famoso en la
Sierra Maestra por sus depredaciones de todo tipo. Después
del combate victorioso contra las fuerzas de Sánchez Mosqueda los rebeldes
habían caminado por las riberas del río La Plata y después, cruzando el río Magdalena,
habían vuelto a la zona ya convenida por ellos en Caracas. Alrededor del 14 de
Enero habían sido apresados 11 campesinos y 6 de ellos fueron llevados a bordo
del guardacostas # 3 y el 23 de febrero arrojados al mar a varias millas de la
costa por el teniente Julio Lament con excepción de Agripino Cordero que logró
mantenerse a flote durante 14 horas y nadar hasta alcanzar la orilla. En los
meses anteriores al combate del Uvero la situación nacional estaba marcada por el
auge de la lucha revolucionaria y por el incremento despiadado de la represión.
La acción heroica del 13 de Marzo infundió terror al tirano y a partir de ese
momento los cuerpos represivos redoblaron su feroz repercusión de los elementos
revolucionarios. En un intento por aparentar normalidad, el régimen estableció
las garantías constitucionales el 15 de Abril aunque seguía manteniendo un
control sobre la información relacionada con las operaciones militares. El
pueblo que se había enterado de la espantosa represión impuesta por la
dictadura siguió atentamente el juicio que se celebró en Santiago con motivos
de los sucesos del 30 de Noviembre y Desembarco del Granma. Paralelamente la
campaña en el terreno político, en el orden militar y los mandos de la dictadura
tomaron una serie de medidas de reforzamiento para liquidar el foco guerrillero
de la Sierra.
después de las acciones de la
Plata y Llanos del Infierno, el Ejército de Batista despidió
grandes contingentes de tropas a la Sierra Maestra,
reforzando los cuarteles de La
Plata, El Macho, Ocujal, Uvero y Chivirico.
Geográficamente Uvero es uno de llanos costeros
abiertos entre los espolones montañosos de las vertientes sur de la Sierra Maestra por
la erosión y la acumulación aluvial de los ríos que descienden de la
cordillera. En éste pequeño llanito frente al estribo terminal por el oeste fue
el escenario del combate del Uvero. Uvero se caracterizaba por una ancha franja
de uvas caletas a lo largo de la costa, de ahí se origina su nombre. En el año
1944 la familia Babún comenzó a fomentar lo que devino 10 años después en la
empresa más importante del país en lo que respecta a la comercialización de la
madera, adquiriendo algunas porciones de tierra en Uvero, con vista a
establecer su principal punto de embarque de madera cosa que dio origen al
batey llegando a construir 18 casas para los trabajadores que laboreaban en
dicho lugar y fuera del marco del batey abrió caminos a las montañas que iban
desde Uvero al Zapato, Peladero, Loma del Indio, la Siberia y otros. El Indio
es el lugar donde establecieron campamento los rebeldes días antes del combate
del Uvero. A fin de capturar nuevas armas y además estremecer al régimen
tiránico, Fidel determinó el ataque de la guerrilla al Cuartel del Uvero. Esta acción
obligaría a Batista a reconocer públicamente la presencia de los rebeldes en la Sierra Maestra y
demostrar su capacidad de atacar una instalación bien defendida por las tropas
escogidas. Al amanecer del 27 de Mayo de 1957, Fidel ordenó a la columna guerrillera
dirigirse hacia la costa para atacar al Cuartel del Uvero. En esta instalación
construida de madera machambrada y tejas de zinc estaban atrincherados 59
hombres seleccionados del escuadrón 11 Regimiento 1 de Santiago de Cuba y de
diversas unidades de artillería e infanterías de Camagüey, Santa Clara y La Habana. Poco después
de las 3 de la madrugada, la avanzada rebelde alcanzó finalmente el punto desde
el camino que bajando la loma se une con el camino de la costa aproximadamente
a 1Km y medio de Uvero. Fidel quitó el seguro de su fusil, se acomodó
firmemente, apoyó la culata del arma en el hombro y comenzó a tomar puntería. A
su alrededor los combatientes que estaban cerca esperaban tensos con sus armas
preparadas. Lentamente Fidel oprimió el disparador de su fusil. Eran
exactamente la 5:15 am. Los guardias del cuartel se rindieron poco más de las
8.00 am. La acción había durado casi exactamente 3 horas. El botín de guerra
capturado al enemigo en Uvero fue de: 45 fusiles en total, 24 Garand, 20 Springfielg
y un fusil ametralladora browing, cerca de 6000 tiros 30.06 y diversos equipos,
uniformes, botas, mochilas, cananas, armas cortas y cuchillos. Los muertos en
combate del ejercito rebelde fueron: Julio Díaz González, Emiliano "Nano
Díaz), Gustavo Adolfo Moll, Francisco Soto Hernández, Ancelmo Vega, Eligio
Mendoza y Rigoberto Silleros. Los heridos: Juan Almeida Bosque, Félix Pena,
Miguel Manals, Mario Maceo, Manuel Acuña, Mario Leal y Enrique Escalona. Por
parte del ejercito batistiano los muertos fueron: el Sargento Nestor Domínguez,
Los cabos Edinardo Fundora y Angel Loreuz Sana y los soldados Rigoberto
Montoya, Oscar Rodríguez, Aurelio Hernández, José Guedas, Lorenzo Díaz,
Francisco Hernández, Rodolfo Gutiérrez y Flavio Durán, además 19 guardias heridos,
algunos graves, éstos fueron llevados al puesto sanitario del cuartel y
atendidos por el Che. Se hicieron 14 prisioneros. El Combate del Uvero fue un
hito fundamental en la historia de la
guerra revolucionaria contra la dictadura de Batista. Para la tiranía significó
un duro golpe al que trató de responder inútilmente, tanto en el terreno
militar como el de la propaganda. Para el Ejército Rebelde representó su
consolidación material y moral y la reafirmación plena de la supremacía de la
línea estratégica mantenida desde la Sierra Maestra en la lucha revolucionaria. En el
orden material Uvero trajo como resultado el acrecentamiento apreciable de los
recursos en armas de la guerrilla. Fue en este combate donde los combatientes
rebeldes aplicaron por primera vez de manera cabal la experiencia de surtir en
armamento a la guerrilla de los recursos arrebatados en el campo de batalla al
enemigo. Con relación a esto Fidel planteó el 28 de Mayo de 1965: "Cuando
aprendimos a quitarle las armas al enemigo; habíamos aprendido hacer la
revolución; habíamos aprendido hacer la guerra; habíamos aprendidos a ser
invencibles; habíamos aprendido a vencer" En el orden moral, la
importancia del combate del Uvero, fue que precisamente aquí donde los
participantes adquirieron la convicción plena de que la guerra podía ser
ganada, de que la guerrilla era una fuerza invencible inclusive en
circunstancias adversas.
“A partir de éste combate” escribe el Che, “nuestra moral se acrecentó enormemente,
nuestra decisión y nuestras esperanzas de triunfo aumentaron también
simultáneamente por la victoria y aunque los meses siguientes fueron de dura
prueba, ya estábamos en posición del secreto de la victoria sobre el enemigo.
Fue la victoria que marcó la mayoría de edad de nuestra guerrilla.” A la semana
siguiente se envió a la
Sierra Maestra el 1er batallón del regimiento número 1 de
infantería integrado por 800 hombres entrenados por asesores norteamericanos en
la lucha antiguerrillera y equipados con armas modernas por Estados Unidos. A
mediados de julio se produjo un acontecimiento
de gran importancia: la creación de la Columna 4 en Llanos del Infierno a la que
pertenecían Ramiro Valdés, Ciro Redondo, Lalo Sardiñas y otros. Esta columna
fue puesta bajo el mando de Ernesto Che Guevara, que había sido ascendido a
Comandante el 21 de ese mismo mes. Fidel instauró la Comandancia General
en La Plata bajo
la dirección de la columna No.1 dirigida por el propio Fidel en el territorio
del municipio Guamá. Se crearon un total de 28 campamentos rebeldes los cuales
operaban a lo largo y ancho del mismo. Batista ordenó la reconcentración de los
campesinos de la Sierra
Maestra en zonas seguras (Uvero, Chivirico, Bueycito y
Santiago de Cuba), seguida de la declaración de la Sierra Maestra como
zona de muerte. Muchas familias perdieron a sus hijos, sus animales, sembrados
y hasta sus casas fueron destruidas por las metrallas de los aviones, por las
llamas de napalm, en bombardeos indiscriminados a la Sierra Maestra y
por la quema y saqueo directo del ejército de Batista.
Uno de los hechos más horrendos después del Combate de
Uvero fue cometido en este territorio de Guamá el 31 de Julio al 6 de Agosto de
1957. A
15 Km de
Uvero, un capitán del ejército de la dictadura al mando de 250 hombres bien
armados llevó a cabo el más repugnante acto de barbarie cometido contra los
campesinos de este municipio, conocido como “La Masacre de Peladero”. Durante
estos días fueron asesinados de las formas más horrendas 14 campesinos. Este
hecho fue informado por la tiranía mediante un parte oficial publicado por la
prensa de la época el 3 de Agosto de 1957, como el resultado de los choques del
ejercito con los rebeldes en la finca de Peladero, en la cual se reportaban 10
insurrectos muertos que no eran más que 10 campesinos apresados y que ese días
aún estaban vivos. El día 6 de Agosto asesinaron no sólo a los 10 anunciados
por parte del oficial, sino a un total de 14 cuyos cadáveres fueron regados por
distintos lugares de El Majá. Algunos estaban quemados y otros devorados por
los puercos y los perros. Los campesinos asesinados fueron:
Miguel Burgos, Roberto Rosabal, Marzo Pérez, Santo Díaz, Alfredo
Valverde Vázquez, Valentín Peña (Chico el tuerto), Francisco Salazar
(Panchito), Jesús Oliva (Mimiño), Papi Oliva, Sergio Oliva, Alberto Arias
(Tronco), Félix Arias, Tano Carrión (Galletano), Quino Oliva.
Palma Mocha es
un caserío campesino que queda a 6
Km de Ocujal del Turquino y unos 3 de la Plata y a unos 600 metros del mar,
ubicado a orillas del río que llevaba el mismo nombre. En éste lugar se produjo
el 20 de Agosto de 1957 el combate de Palma
Mocha. Las tropas rebeldes estuvieron dirigidas por el comandante Fidel
Castro Ruz y contaba con alrededor de 50 hombres. Se combatió con unos 100
soldados pertenecientes a la compañía 2 del Batallón # 1 del regimiento de
artillería al mando del capitán Juan Moreno Bravo que había dirigido la tropa
enemiga que chocó con los expedicionarios del Granma en Alegría de Pío. El
combate comenzó alrededor de las 2.00
a.m. del día 20 de agosto. El objetivo que se perseguía
era dar un golpe que los despojara de la iniciativa en el llamado Plan Alzado
que pretendía liquidarlas fuerzas
rebeldes, causarles el mayor número de bajas posibles y capturar nuevas armas y parques. El combate fue uno de
los más intensos del primer año de lucha en la Sierra Maestra. Ya
es pleno día cuando Fidel ordena retirada. El Ejercito Rebelde tuvo 12 bajas, 7
heridos y 5 muertos, los caídos fueron: Rigoberto Oliva, Eduardo (Yayo)
Castillo, Juventino Alarcón y Juan José Frómeta. Se capturaron algunas armas y parque.
El enemigo tuvo 8 bajas: un oficial muerto y siete soldados heridos. Desde el
punto de vista estratégico sus resultados fueron mucho más significativos, pues
se arrebató la iniciativa al enemigo. La
CIA atacada fue retirada de la zona, quedando frustrado el
plan general ofensivo.
La Mula se encuentra ubicada
entre el río La Bruja
por el Este y por el Oeste con Ocujal del Turquino, por el Norte forma parte de
la Sierra Maestra
y por el Sur con el Mar Caribe. A una distancia aproximadamente de Chivirico de
41 Kms y a unos 19 Kms de Uvero. Este lugar está bañado por la desembocadura
del río del mismo nombre que es realmente el río Turquino. Posterior al Combate
del Uvero, Fidel decide dejar a un grupo de 14 combatientes encargados de
cuidar la zona de La Mula. El
objetivo que perseguía Fidel con este foco era el de proliferar el movimiento
revolucionario en esta zona, apoyar el movimiento 26 de julio en la misma y
nutrirlo de las milicias campesinas que fueron saqueados y maltratados por la
guardia de la tiranía. Este grupo operaba en los
lugares conocidos como Agua Revé, La
Gloria, El Zorzal, Pata de la Mesa, El hombrito, Dos brazos del Turquino y Rico
Verde. Hacia la parte Este buscando Uvero, operaban en La Uvita Vieja, Las Coloradas,
Charles, La Bruja,
El Naranjal, Las Piñas, La
Conchita, La
Punta, etc. A este grupo se le comunicó que los guardias de
Batista se estaban dedicando a maltratar, robar y saquear a los campesinos y
que al frente de estos soldados de la dictadura estaba el Teniente Sosa. El 12
de septiembre de 1957, a
la 1.00pm aproximadamente se le realizó rápidamente una emboscada al teniente
Sosa y a su compañía que se dirigían a la casa del campesino Eusebio Suárez.
Esta emboscada estuvo dirigida por Roberto Fajardo y participaron los rebeldes
Jesús Mendoza, Antonio Oliva, Betico Berneau, Edelfin Mendoza, Manuel Piñeiro,
Tete Puebla, Esperanza Millán y Bitaliano Ramos González. La acción logra el objetivo propuesto que era
ajusticiar al teniente y hacer que el ejército de Batista abandonara la zona.
Con respecto a esta acción el Che le escribe a Fidel un mensaje que dice así: “Los
muchachos que dejaste en la zona han llevado a cabo algún hecho importante
porque la fragata está cañoneando intensamente la zona.”
El Sonador es un pequeño barrio campesino que queda a
unos 6 km
de Chivirico y a unos 4 del mar. El día 16 de septiembre de 1957 Fidel bajó a
este barrio y conjuntamente con él, Raúl, Almeida, Universo Sánchez, Celia
Sánchez, Felix Pena, Vilo Acuña, y se encontraban además Israel Pardo y Miguel
Pardo. El objetivo era desviar la atención del ejército hacia este lugar para
permitir una acción exitosa al Che. El combate de Pino del Agua por otro lado
desmentía la campaña que venía realizando Rolando Masferrer contra Fidel y
Ejército Rebelde con el fin de postularse como “Consejal de la República”. Este señor
había creado un grupo paramilitar conocido como “Los Tigres de Masferrer” que
eran más asesinos sin escrúpulos que el ejército de Batista. En la madrugada
del 17 de septiembre Fidel se reunió con los campesinos de la zona en un bar
que existía en este lugar llamado “El Zapatazo”, propiedad de los hermanos
Francisco Jiménez (Paquito) y Guillermo Deliz. Ese día se le unieron a Fidel
algunos campesinos de la zona como fueron: Leocadio Ferrer y sus hijos Harold,
Araldo y Arnaldo y Alarcón. Al retirarse Fidel le pidió a Paquito que le
llevara una carta al cuartel de Chivirico dirigida a los soldados, que según el
propio Paquito decía así más o menos: “Soldados cubanos, hijos y nietos de
mambises, que dieron su vida por la libertad de Cuba, no permita por ningún
concepto que se manche tu honor con la instrucción de un ejercito compuesto por
criminales, ladrones; sacados de las cárceles para asesinar a tus hermanos (…).
Mar Verde esta ubicado en la profundidad de la Sierra Maestra,
bordeando el río Turquino a una distancia de 22 Km de la costa sur o sea
del mar. En este lugar el 29 de noviembre de 1957 se llevo a cabo el combate
que se conoce con el nombre de Combate de Mar verde, dirigido por Fidel. Este
combate fue contra las fuerzas de Sánchez Mosqueda. Camilo había luchado con
ellos el día anterior por la zona de Altos de Conrado y producto a refuerzo que
le llegó a Sánchez Mosqueda por el Sur, el Che tuvo que retirarse. Una vez más
se salvaba el esbirro. El Ejército de Batista había sufrido algunas bajas y por
parte de los Rebeldes estaban heridos Roberto Fajardo, Javier Pozo, Joel
Iglesias y había muerto el Capitán Ciro Redondo. Después de 15 meses de campaña
en la Sierra Maestra,
las zonas de operaciones del Ejército Rebelde se amplió a raíz del segundo
combate de Pino del agua con las armas capturadas en los últimos combates y es
que se concreta la idea de generalizar la guerra en toda la provincia, con la
creación de dos nuevas columnas, la # 3 “Santiago de Cuba” y la # 6 “Frank
País” y para cuya dirección fueron designados y ascendidos a comandantes, los
capitanes Raúl Castro Ruz y Juan Almeida Bosque, ambos atacantes al Cuartel
Moncada y expedicionarios del Gramma.
El
7 de junio de 1958 el comandante José
Quevedo Pérez del Ejército de Batista fue citado por el general Cantillo con el
objetivo de informarle de la operación FF
o Fin de Fidel. Le indicó que desembarcaría por la desembocadura de Palma Mocha
y que el objetivo era forzar a los Rebeldes a que se retiraran hacia el oeste
de la provincia para darle la batalla final al grupo que comandaba el Doctor
Fidel Castro Ruz y obligarlo a que abandonara el país. Se suponía que esta
columna rebelde era la mejor armada y que una vez derrotada sería fácil dominar
el resto de las otras columnas en los
distintos lugares donde la misma se hallaban. El día 10 de junio se produjo el
desembarco del Ejército Batistiano por el arroyo de las cuevas. El día 16 de
junio los guardias reciben una orden donde se les plantea dos misiones
fundamentales: la primera llegar hasta el Jigüe y permanecer allí hasta nueva
orden, y la segunda rescatar a los prisioneros
que se hallaban en poder del líder Rebelde Doctor Fidel Castro Ruz. El lugar donde se
suponía ubicada la cárcel insurreccional era en una zona cerca de El
Naranjal, conocida por Los Bajos de
Jiménez. El día 16 de junio en un lugar conocido como el Alto de la Caridad, el Ejército de
Batista cae en la emboscada preparada por la guerrilla al mando de Ramón Paz
donde se les despeñan los mulos que llevaba la comida. Al amanecer el 11 de
julio a esto de las 5.30 o 5.40 da inicio una de las batallas de más
envergadura y decisiva dentro de la Ofensiva
Rebelde, pues duró desde ese mismo día 11 de julio hasta el
21 de ese mismo mes, o sea, durante 10 días. Ese mismo día por la noche Fidel
hace un comunicado al comandante Quevedo en el cual le pide rendición de las
fuerzas que están bajo su mando, explicándole detalladamente las razones
mientras que continúa el combate de los refuerzos a lo largo del camino a
través del río La Plata.
Los soldados estaban desfallecidos sobre las trincheras y se
desmayaban. Las resistencias físicas de
los mismos tocaban su final. Los Rebeldes habían decretado una tregua la
cuál fue aprovechada por la jefatura del
ejército enemigo que recorrió las trincheras y las posiciones de sus hombres y
se dieron cuenta que la situación era irresistible, que el único camino que les
quedaba era el de la rendición. El campamento enemigo fue visitado por algunos
rebeldes. Dentro de ellos están Braulio Coroneaux que había sido militar y
después se alzó en la sierra. También Guillermo García penetró y confraternizó
con los soldados. Los rebeldes obsequiaron cigarrillos, pedazos de quesos, agua
y otros comestibles a los soldados que con ellos hablaban. El día 20 por la
tarde se reúne Fidel y el comandante Quevedo para realizar una entrevista y
decidir la rendición. Las dos partes pactaron sobre las siguientes bases:
1.
Se suspendería el
fuego y todo personal enemigo sería atendido por el médico del batallón y por los médicos rebeldes.
2.
Todos los prisioneros
serían entregados a la Cruz Roja
Internacional incluyendo a los que estaban en Puerto Malanga.
3.
No destruir armas
algunas de modo que fueran entregadas en las mejores condiciones posibles.
4.
El único
prisionero de guerra sería el Jefe del Batallón.
Estas
condiciones fueron aceptadas por la parte derrotadas y en las primeras horas de
la madrugada del día 21 de julio se procedió a cumplir con la rendición del
batallón # 18. Así culminaba una de las batallas más duradera y más sangrienta
de las que se conocen en la historia de la Revolución Cubana
en su proceso de liberación. El saldo se la batalla fue: por el Ejército Rebelde
el capitán Andrés Cuevas y tres rebeldes más muertos y cuatro gravemente
heridos. Por el Ejército de Batista 41 muertos entre soldados y oficiales,
cerca de 30 heridos, 241 prisioneros y 249 armas ocupadas .Luego del fracaso de
la ofensiva ante la heroica resistencia de las tropas rebeldes la columna #3 de
Santiago de Cuba comandada por Almeida, regresó nuevamente, el 12 de agosto de
1958, al territorio del III Frente Oriental. Con ello se inició una etapa
decisiva y de extraordinaria importancia para el desenlace final de la guerra
en esta zona del país. En esa oportunidad después de estos varios días en el
campamento de “La Anita”,
el comandante Almeida establece definitivamente su Comandancia General en La Lata, desde donde organiza y
dirige las operaciones que se desarrollan en todo el extenso territorio del III
Frente. Por otro lado la
Columna No.1 bajo el mando de Fidel llevó a cabo diferentes
acciones que fueron debilitando la ofensiva general contra la Sierra Maestra que llevaba a
cabo el ejército de la dictadura sufriendo más de 1000 bajas, se hicieron 400
prisioneros y se le capturaron más de 507 armas. De la Columna No.1 se
desprendieron las Columnas “Antonio Maceo y Ciro Redondo”, comandadas por
Camilo Cienfuegos y Ernesto Che Guevara las cuales tendrían la histórica misión
de llevar la invasión hacia el occidente del país pudiendo llegar hasta la
provincia de Las Villas y terminando exitosamente con la toma de Yawajay y
Santa Clara, batallas que ponen el punto final a la Dictadura Batistiana.
la cual cae el 1ro de Enero de 1959. Conjuntamente con estas acciones el I y
III frente en acciones bien equlibradas logran cercar la ciudad de Santiago de
Cuba tomándola el día 1ro de Enero de 1959. De esta forma triunfa la Revolución, después de
tres años de dura lucha en la Sierra Maestra,
el llano y en todo el Territorio Nacional.